Algunos la cumplen sin darse apenas cuenta, es el caso de mi
sobrino Ángel, con sólo 7 meses, ya está marcando la Vida de los que lo rodean.
Sus problemas, pero también sus sonrisas, tienen un potente efecto, el más
importante de todos los que se puedan tener, aumentar la capacidad de Amar que
todos poseemos. Amarle cada vez más a él, a los demás, ser conscientes de lo
que valemos, de lo increíble del milagro de la Vida, amar y dar gracias a Dios.
Yo también, al igual que tú, quiero dejar huella. Que
mi paso no sea infructuoso, que las personas que me ha tocado conocer, aquellas
con las que me he cruzado, se lleven un buen “sabor de boca”. Tocar los
corazones, ayudar y contribuir a un mundo mejor, lleno de gente buena.
Desde hace algunos años, todo lo que hago también a nivel
profesional, intento encauzarlo en ese sentido, reconozco que es una aspiración
muy alta, y puede que no la consiga en demasiadas personas, pero os garantizo
que en el intento, en el esfuerzo por hacer las cosas bien, encuentro la mayor
de las satisfacciones. Soy HOY, mucho más Feliz, y es gracias a aquellos que
han dejado y dejan cada día, su HUELLA. (Gracias especiales a mi hermano Álvaro,
a punto de cumplirse 5 años de su muerte, y a Angelito, mi sobrino más pequeño)